3.4.2 Gestión de Problemas




La gestión de problemas se centra en abordar las situaciones negativas que ya están afectando el proyecto. Este proceso generalmente incluye las siguientes etapas:

Identificación y Definición de Problemas:
  • Reconocer y documentar claramente los problemas que están ocurriendo.
  • Definir el problema en términos de su impacto en los objetivos del proyecto (alcance, cronograma, costo, calidad).
  • Recopilar información relevante sobre el problema, incluyendo su causa (si se conoce), su magnitud y los stakeholders afectados.
Análisis de Problemas:
  • Investigar la causa raíz del problema para comprender por qué ocurrió. Esto puede involucrar técnicas como el análisis de los 5 porqués, el diagrama de Ishikawa (espina de pescado), etc.
  • Evaluar el impacto del problema en el proyecto y en los stakeholders.
  • Determinar la urgencia de la resolución del problema.
Desarrollo de Soluciones:
  • Generar posibles soluciones para abordar el problema. Esto puede requerir la colaboración del equipo del proyecto y otros expertos.
  • Evaluar las diferentes soluciones en términos de su viabilidad, costo, tiempo de implementación y efectividad potencial.
  • Seleccionar la mejor solución para resolver el problema.
Implementación de Soluciones:
  • Desarrollar un plan de acción detallado para implementar la solución seleccionada.
  • Asignar responsabilidades y plazos para las tareas de implementación.
  • Ejecutar el plan de acción para resolver el problema.
Seguimiento y Evaluación de la Solución:
  • Monitorear la efectividad de la solución implementada para asegurar que el problema se haya resuelto y que no hayan surgido nuevos problemas como resultado de la solución.
  • Documentar las lecciones aprendidas del proceso de gestión del problema para mejorar la gestión de problemas futuros.